Adios a un año de pesares. Adiós a un año descabezado, sin sentido, demonizado en mi interior. Adiós al año del crack por dentro, de sentimientos apagados como la luz de una vela. Adiós a los brebajes amargos y corrompidos, a sueños destrozados a jirones, a camas sin sábanas que den calor. Adiós a un año de veneno por agua, de agujas por besos, de muerte por nada.
Adiós, en fin, a 2008.
Hasta nunca, asqueroso compañero de viaje.
jueves, 1 de enero de 2009
Y hasta nunca!!!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario